El 9 de julio empezó yendo a desayunar y haciendo las tareas de la casa. Después de eso, los monitores nos representaron la siguiente parte del teatrillo. En ella, el caballero llegó al castillo del silencio, y sacó la conclusión de que cuanto más en silencio esté, más se conocería a sí mismo. A continuación, nos reunimos por grupos para comentar el teatrillo y hacer las dinámicas sobre conocernos a nosotros mismos.

Al terminar, fuimos todos juntos a la piscina y volvimos para comer. En el tiempo de después de comer hicimos los talleres de pulseras y chapas y después nos hicimos las fotos por grupos.
Acto seguido hicimos un taller de relajación en el que reflexionamos sobre los sentimientos que tenemos en el interior pintando sal con tizas de colores. Después nos juntamos por grupos para hablar de ello y otros temas. A continuación, fuimos a la piscina, y al volver tuvimos una celebración en la que fuimos nombrados caballeros, al acabar cenamos y comenzó la velada de juegos en la que ganó nuestro grupo 1.

Acabamos el día con las buenas noches de Maribel y Andrea, y el canto de buenas noches.

Después de desayunar y limpiar la casa, nos reunimos en grupos para ir a buscar el Camino de la Verdad. Salimos de la casa y fuimos haciendo paradas en diferentes sitios donde había que hacer pruebas y reflexiones sobre nuestras relaciones con los demás. Al final de la mañana, llegamos a la campa donde el caballero nos tenía preparada una carta de una persona especial que resultó estar vacía.

Por la tarde reflexionamos sobre las relaciones con la familia, los amigos y los grupos de Somalo a través de diferentes canciones. Para terminar con la reflexión y a modo de resumen nos inventamos una canción de tolo lo vivido hasta ahora en el campamento.

Tras la piscina hicimos una celebración en la que comprobamos que Jesús es el amigo fiel en quién podemos confiar y leímos una carta que tenía preparada para nosotros.

Después de cenar, los monitores nos regalaron la noche de misterio: hicimos un pasaje por el castillo de Somalo que estaba lleno de espectros donde parte del grupo fue capturada para ser uno de ellos.

Más tarde con el juicio del sereno, la oración y las buenas noches nos fuimos a la cama para continuar con esta gran aventura que es Somalo 2017.

grupo 8

Suena la música como cada día a las 8.30 y toca levantarse. Después de un elaborado desayuno nos hemos sacado las fotos de recuerdo. Primero por grupos y posteriormente por lugares de procedencia. En todas las fotos hemos contado con un invitado especial, nuestro amigo el Caballero de la Armadura Oxidada.

Hoy hemos visitado el castillo del silencio. Para poder entrar en él, hemos tenido que hacer uso de nuestros escudos. En ellos hemos escrito una frase que nos representara. Además, hemos dejado que el resto de compañer@s nos escribiera como nos veían desde su perspectiva. Para acabar la mañana hemos tenido un encuentro muy especial. Un encuentro con nosotr@s mismos en el que hemos tenido la oportunidad de pensar , reflexionar, hacernos preguntas y conocernos mejor.

Ya teníamos mono de piscina, así que… al agua patos… Después de que algunos tomarán el sol y otros la sombra, hemos vuelto a la casa. Hoy teníamos un menú especial. Pasta, carne y helado de fresa.

A la tarde hemos empezado con un momento de relajación. Isidro nos ha recordado la importancia de parar y pensar en silencio sobre nuestra vida. En grupos hemos tenido que construir nuestro pozo de los sueños. Para ello hemos escrito nuestros sueños en un globo. Lo que nos frena en una piedra atada al globo. Y después en nuestro pozo, hemos pegado quién nos ayuda a conseguir nuestros sueños.

Y después vuelta a la piscina. Hacía mucho calor y la gente se ha lanzado como loca a comprarse un helado, aunque la verdad que había muchas nubes y amenazaba tormenta.

A la vuelta las chicas se han trasladado al edificio de los chicos. Por fin estamos todos juntos.

En la eucaristía de hoy, Santi Dominguez ha presidido una celebración llena de recuerdos. Por una lado, presentar el trabajo de grupos. También hemos sido nombrados caballeros de la luz. Y para acabar hemos recordado nuestra colaboración con el proyecto Suriya. Santi nos ha recordado que somos una parte activa del proyecto y nos ha regalado una pulsera muy molongui que dice I love Don Bosco.

Ahora estamos esperando a ver qué velada nos tienen preparada los monitores porque….ha vuelto a llover a la noche… seguro que nos lo pasaremos bien. Guiño guiño, codazo codazo…

Desde Nanclares, corto y cambio.  Un día más, un día menos.

Grupo 3