Nos levantamos de la cama con unas canciones muy alegres para bajar inmediatamente a desayunar. Era la primera mañana del campamento y tocaba hacer las primeras tareas de limpieza. También tocaba juntarse por primera vez en los nuevos grupos de HRC y con unas dinámicas intentamos conocer un poco más a los nuevos compañeros. Antes de ir a la piscina repartimos pañuelos de colores para cada grupo y jugamos al juego de robar el pañuelo entre todos los grupos. El rato de la piscina se pasó muy rápido para algunos grupos puesto que tenían que ducharse. La hora de la comida y el rato libre de después nos sirvieron para ir relacionándonos más con toda la gente y empezar a apuntarnos a los campeonatos. En el día de ayer empezamos con el viaje a lo largo de la historia, concretamente por la prehistoria, y tuvimos un recorrido por toda la casa realizando pruebas de nuestros antepasados, vistiéndonos como ellos, pintando murales,…
El bocadillo de la merienda nos dio fuerzas para ir a la piscina y pasárnoslo muy bien. A la vuelta, nos volvimos a juntar por grupos de HRC para reflexionar sobre la luz y la oscuridad, las cosas que nos gustan y las que no, lo bueno y lo malo… Además cada miembro del grupo tuvo un farolillo para la celebración. El momento de la celebración fue muy bonito porque al principio estábamos a oscuras y después las velas iluminaban todo el hall. Con los cánticos hicimos una celebración perfecta. La cena y el tiempo libre fueron un rato que se paso muy rápido y llegamos con ganas a la velada de la noche. En la velada, llamada TROGLO TV, nos separamos los chicos y las chicas para hacer unas pruebas y un jurado muy estricto nos valoraba y nos daba los puntos. Al terminar el juego se hizo el juicio del zorro y conseguimos adivinar los nombres, por lo que para el último día ya tenemos dos personas para el culi-culi.
Miriam y Julián
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